Esta no es una auténtica receta. Surge de la falta de tiempo para hacer la comida y de la necesidad de aprovechar una serie de sobras. En mi casa no se tira comida. Desde pequeño me educaron en esta línea y soy incapaz, salvo que por un despiste algo se estropee, de tirar nada.
Ingredientes (2 personas):
– 1 lata de albóndigas de 400 gramos (Puede ser de cualquier marca).
– 4 champiñones (pueden estar muy pasadizos como estaban los míos)
– 1 diente de ajo picado.
– Las sobras de la salsa de cacahuetes que hice el otro día. Aproximadamente un cuarto de la que hice:
https://emporiton.wordpress.com/2015/04/20/pavo-al-wok-con-salsa-de-cacahuete-indonesia/
– 1 Cucharada sopera de aceite de oliva.
– Sal
– Pimienta.
Preparación:
Cortar en láminas los champiñones y pasar por la sartén añadiendo sal, cuando ya hayan soltado el agua añadir el aceite y el diente de ajo finamente picado.
Abrir la lata de albondigas y añadir el jugo de la misma a la sartén con los champiñones. Remover y cuando esté caliente agregar la salsa de cacahuete. Volver a remover hasta que quede uniforme. Por último ponemos las albóndigas para que se calienten en la salsa.
Ajustar de sal y pimienta.
Los guisantes que veis en la foto venían en la lata